Mensaje
por Alberto Sosa » Vie 13 May 2005 9:03
Estimados foreros:
Voy a tratar de responder a las sugerencias de nuestro amigo Pau Gilabert, que amablemente me envió dos cedés de la misma obra, grabados por procedimientos distintos.
Él para distinguirlos utilizó dos vírgenes de la misma marca y modelo, pero de distinto color, con objeto de reconocer en todo momento cuál había sido grabado con cada método de los empleados.
Cuando los recibí, teniendo en cuenta que yo desconocía el método usado en cada uno, los escuché atentamente y descubrí que entre ellos existía una diferencia más que palpable (audible). El primero, serigrafiado en color negro, mostraba una acusada falta de detalles, un sonido muy romo y sin ?aire?. Yo sin saber que me ofrecería el segundo, pensé que la grabación era deficiente, bastante más que las que yo suelo hacer utilizando el PC, con unos soportes más que probados y a velocidad 1:1. Escuché el segundo, en este caso serigrafiado en color amarillo y ¡apareció la música!. Allí estaba todo; presentaba una tímbrica correcta, sin excesos aristados ni por el contrario demasiado recortada. La aireación era perfecta, aparecían todos los matices más escondidos y se generaba una escena más que creíble. A continuación lo cotejé con el original que yo poseo, y me di cuenta de que se trataba de un ?clon? perfecto. Salvo la predisposición que suele tener uno a ?querer oír? mejor original que copia (en mi caso haciendo pruebas con la colaboración de un compañero, y sin saber la procedencia de la fuente, yo no he acertado jamás en un 100%, lo que demuestra que si existen diferencias deben ser mínimas) el cedé amarillo enviado por mi amigo Pau conserva todos los ingredientes existentes en el original.
Evidentemente los discos originales ofrecen, además de un ?posible? mejor sonido que la mejor de las copias, una extensa documentación impresa, complemento indiscutible e indispensable de la esencia sonora del soporte que adquirimos. Yo personalmente sería incapaz de colocar en mis estanterías un disco grabado al que le faltase la información adicional que presentan los originales, por lo que cuando hago alguna copia, que rara vez no es sustituida por su original, la acompaño de la documentación necesaria para que pueda simularse entre los cedés en donde queda alojado. Esto claramente obliga a realizar un trabajo adicional, que para nada me molesta. Incluso diría que me gusta.
A los más allegados al foro, que muestren interés por la música antigua, ponerse en contacto conmigo a través de un privado para proceder a eviarles alguna muestra interesante.
Un saludo
Alberto Sosa
Última edición por
Alberto Sosa el Vie 13 May 2005 11:07, editado 1 vez en total.
... y la música continuaba aún cuando el sonido había desaparecido.