Estimado amigo Juan:
El disco que nombras es una de las grandes maravillas que debe existir en la discoteca de cualquier melómano, que se precie. Yo aún no lo he reseñado porque estuvo durante mucho tiempo descatalogado, hasta que al fin salió a la luz, aunque en una edición distinta, afortunadamente más barato. Hazte con él sin reservas. Te encantará. Es una de las cimas violinísticas, tanto de Biber como del gran Goebel.
Te coloco la imagen de portada del que yo tengo en mi discoteca
Un abrazo
Alberto
... y la música continuaba aún cuando el sonido había desaparecido.